Nueces vs cáncer colorrectal


Según un estudio realizado en EE.UU., el consumo de nueces podría reducir el desarrollo del cáncer de colon.

Los investigadores del estudio hallaron que en los tejidos tumorales se asoció un menor tamaño de tumor a un mayor porcentaje de omega-3. La incorporación de ácidos grasos omega-3 presentes en las nueces provoca cambios significativos en el perfil de la expresión de los ácidos nucleicos del tejido de cáncer colorrectal. Es decir, reducen la inflamación y el suministro de sangre al tumor, lo que favorece la desaceleración de su crecimiento.

Tania Mesa – Nutricionista y Enfermera de Neolife


Un estudio realizado en ratones con cáncer de colon demostró que aquellos que consumieron nueces ralentizaron el desarrollo del tumor.

Un nuevo estudio realizado por los investigadores de la Escuela Médica Harvard (EE.UU) y publicado en el Journal of Nutritional Biochemistry (1), demuestra que el consumo de nueces puede reducir el desarrollo de tumores de colon.

Las nueces son uno de los alimentos más nutritivos y saludables que existen, debido a su contenido en antioxidantes (ácidos grasos monoinsaturados, poliinsaturados, vitamina E y minerales). Sus propiedades nutricionales son ya bien conocidas en la prevención de enfermedades cardíacas, diabetes y transtornos neurológicos. Pero ahora, además, a esta larga lista habría que añadir la ralentización del crecimiento de los tumores colorrectales, debido a que producen cambios en los genes cancerígenos.

Los micro ácidos ribonucleicos (miARN) están implicados en la alteración de la expresión genética. La investigación demuestra que una dieta rica en nueces causa cambios significativos en los perfiles de expresión de los miRNA en los tejidos del cáncer de colón.

Se analizaron dos grupos de ratones inyectados con células de cáncer de colón HT-29. Al primer grupo se le alimentó con 60 gramos de nueces al día (equivalente a dos raciones/día), mientras que al segundo se le alimentó con una dieta control similar, pero sin nueces.

Tras 25 días, se observó que en los tejidos tumorales de los ratones alimentados con nueces se había incrementado hasta 10 veces la cantidad total de ácidos grasos Omega-3, incluyendo el ácido alfalinoleico (ALA), un ácido graso vital para diversos procesos del cuerpo y conocido por reducir la inflamación.

Neolife. Nueces vs cáncer colorrectal

Existen múltiples factoren que incrementan el riesgo de padecer cáncer colorrectal: alimentación, actividad física, tabaco, alcohol, edad, historia familiar, enfermedades previas…

El cáncer colorrectal es uno de los tumores más frecuente en España: se producen aproximadamente 20.000 nuevos casos al año en hombres y 14.000 en mujeres. Solo en Europa se detectan 150.000 nuevos casos cada año. En los países occidentales ocupa el segundo lugar en incidencia, detrás del cáncer de pulmón en el hombre y del cáncer de mama en la mujer. Supone, aproximadamente, el 10-15% de todos los cánceres.

Pero, ¿cuáles son los factores que en mayor o menor proporción incrementan el riesgo de padecer este tumor?:

  • Alimentación: las dietas ricas en grasas animales (carnes rojas) y pobres en fibra aumentan el riesgo de sufrir este cáncer.
  • Inactividad física: una vida sedentaria favorece la aparición de esta enfermedad.
  • Consumo de tabaco: aumenta el riesgo de padecer pólipos, que suelen ser los precursores del cáncer colorrectal.
  • Consumo de alcohol: el alcohol podría actuar favoreciendo el crecimiento de las células de la mucosa del colon, dando lugar a la aparición de pólipos.
  • Edad: el riesgo de padecer este cáncer aumenta con los años, ya que aumenta la aparición de pólipos en el colon y recto.
  • Historia personal de pólipos: la aparición de pólipos adenomatosos aumenta el riesgo de padecer esta enfermedad.
  • Historia personal de cáncer colorrectal: las personas diagnosticadas de un cáncer previo poseen un mayor riesgo de padecer un segundo tumor en el colon o recto.
  • Enfermedades inflamatorias intestinales: los dos tipos principales de enfermedades inflamatorias a este nivel son la colitis ulcerosa y la enfermedad de Crohn. Ambas suponen menos del 1% de todos los cánceres colorrectales.
  • Historia familiar: en un 5% de los cánceres de colon se han identificado varios genes, cuya alteración da lugar a unos síndromes que predisponen, en mayor o menor grado, a la aparición de cáncer colorrectal.

El cáncer de colon produce, entre otros síntomas, sangre en heces, cambio en el ritmo de deposiciones, heces más estrechas, tenesmo, dolor abdominal o cansancio.

El cáncer de colon produce una serie de síntomas que pueden variar en función de su localización dentro del intestino grueso:

  • Sangre en las heces: es uno de los síntomas más frecuentes del cáncer de colon. Puede tratarse de sangre roja -más frecuente en tumores de sigma y colon descendente- o de sangre negra -que se mezcla con las heces dando lugar a deposiciones de color negro llamadas melenas-. Tras cierto tiempo de sangrado, y cuando la hemorragia no es detectada o no se acude al médico para su diagnóstico y tratamiento, suele aparecer anemia. Esta anemia puede producir, a su vez, una serie de síntomas como la sensación de falta de aire, cansancio, palpitaciones o mareo.
  • Cambio en el ritmo de las deposiciones: puede aparecer diarrea o estreñimiento en personas con ritmo intestinal previo normal (lo más frecuente es que se intercalen periodos de estreñimiento con periodos de diarrea).
  • Heces más estrechas: esto se produce porque el tumor está estrechando el intestino y no permite el paso normal de las heces.
  • Tenesmo o sensación de evacuación incompleta: aparece generalmente en tumores localizados en la parte más distal del colon.
  • Dolor abdominal: es un síntoma frecuente, aunque se suele tratar de un dolor inespecífico. Cuando el tumor cierra parcialmente el calibre del tubo intestinal, se produce un cuadro de dolor abdominal tipo cólico. Cuando el cierre es completo se llama obstrucción intestinal, lo cual es una situación clínica grave, que requiere asistencia médica urgente.
  • El cansancio extremo o la pérdida de peso sin causa aparente: son síntomas generales e inespecíficos que ocurren con frecuencia en determinadas enfermedades, entre las que se encuentran los tumores de colon avanzados.

Existen dos métodos predictivos de cáncer de colon no invasivos: septina 9 y sangre oculta en heces.

El cáncer colorrectal es uno de los pocos cánceres que se pueden diagnosticar precozmente, es decir, antes de que la persona desarrolle alguno de sus síntomas. En la clínica Neolife utilizamos dos tipos diferentes de pruebas:

  • El test que detecta el biomarcador Septina 9 en el plasma sanguíneo. La presencia de este biomarcador está relacionado con la existencia de este tipo de cáncer.
  • El test de sangre oculta en heces (TSOH), que como su nombre indica detecta si existe o no sangre en las deposiciones.

Si los resultados de estas pruebas son positivos, se una colonoscopia para visualizar el origen del sangrado.

Por tanto, el cáncer colorrectal, a pesar de sus alarmantes cifras, se puede diagnosticar de manera precoz y tratarlo en sus estadios iniciales, donde la supervivencia es mucho más elevada. Y no solo eso: incluso se puede evitar la aparición misma de la enfermedad.

En Neolife incidimos en reducir al máximo o eliminar los factores de riesgo anteriormente definidos, sobre todo lo relativo a la alimentación, alcohol, tabaco y ejercicio físico. Incorporamos en la dieta 30 gramos de nueces (preferiblemente por la noche antes de acostarse) y suplementamos con Omega-3 (369 mg de EPA y 250 mg de DHA con mezcla antioxidante).


BIBLIOGRAFÍA

(1) https://www.jnutbio.com/article/S0955-2863%2815%2900070-4/abstract.