

Las Hormonas
Durante muchos años la medicina ha reconocido los beneficios que tiene para la salud reponer las hormonas que disminuyen con el envejecimiento. El reemplazo de dichas hormonas a niveles fisiológicos (niveles óptimos, pero dentro de los lÃmites normales y no excesivos) ha demostrado que puede mitigar los cambios relacionados con la edad.
En gran medida, la disminución de la calidad de vida en la menopausia y andropausia es debida al declive de nuestras hormonas, que a partir de los 30-35 años decaen entre un 2% y un 5% anual. Al restablecer el balance hormonal apropiado se recupera el equilibrio funcional de nuestro cuerpo, lo cual puede prevenir muchas de las enfermedades asociadas con el envejecimiento y mejorar el bienestar y la calidad de vida.
Testosterona
Se produce en los testÃculos, ovarios y glándulas adrenales. Mejora la libido, la vitalidad, la energÃa, la sensación de bienestar, la densidad mineral ósea, la masa muscular y la fuerza, disminuye la grasa corporal…
Estrógenos
Se producen en los ovarios, en el tejido graso y en las glándulas adrenales. Tienen efectos positivos sobre el sistema cardiovascular, huesos, vida sexual, tersura de la piel, bienestar emocional, sueño, capacidad cognitiva, estado de ánimo…
Progesterona
Se produce en los testÃculos, ovarios y glándulas adrenales. Tiene efectos positivos sobre el sistema óseo, bienestar emocional, capacidad cognitiva, estado de ánimo... Además, es necesaria para el equilibrio de otras hormonas.
DHEA (Dehidroepiandrosterona)
Se produce en las glándulas adrenales y es un precursor de otras hormonas, como la testosterona y los estrógenos. Favorece la reconstrucción de los tejidos (estimulando el metabolismo de las proteÃnas), ayuda a controlar el estrés (contrarrestando el efecto del cortisol) y tiene efectos positivos a nivel cardiovascular, óseo, inmunológico, sexual, de estado de ánimo…
Hormonas tiroideas
Se producen en el tiroides y regulan la tasa metabólica de todas las células. Sus efectos son controlar la temperatura corporal y favorecer el metabolismo del tejido adiposo, lo que ayuda a la pérdida de peso graso y a la bajada de los niveles de colesterol. Son cardio y neuroprotectoras.
HGH (hormona de crecimiento)
Se produce en la pituitaria. Estimula la reparación tisular, la hidratación de la piel y el desarrollo muscular y óseo. La HGH interfiere en el metabolismo.
Melatonina
Molécula relacionada con la fisiologÃa neuroendocrina. Está implicada en la regulación de los ritmos circadianos, tanto endocrinos como no endocrinos, y en el ritmo sueño-vigilia, siendo también una hormona moduladora de la actividad del sistema inmunitario. Es también fundamental en la regulación de la función mitocondrial, para la producción de ATP (la forma de energÃa que la célula utiliza para todas sus funciones). Además, la melatonina es un potente antioxidante y antiinflamatorio.
Las investigaciones demuestran que la terapia de reemplazo hormonal frena el deterioro y el déficit funcional asociado al proceso de envejecimiento y potencia el sistema inmunológico.
Más de medio siglo de investigación en los campos de la inmunologÃa y la endocrinologÃa hacen que hoy conozcamos mejor la importancia del equilibrio metabólico y hormonal y su impacto en el envejecimiento y la salud.
La terapia de reemplazo hormonal se ha estudiado e investigado en profundidad desde la primera mitad del siglo XX. Ya en 1939 se publicó en la revista Science un artÃculo sobre el implante subcutáneo de gránulos de estradiol - pellets subcutaneos -. Desde entonces y hasta las investigaciones más recientes, cientos de artÃculos cientÃficos definen los principios de la Terapia de Reemplazo Hormonal
El National Institute of Aging, agencia norteamericana del envejecimiento, financia la investigación en terapia de reemplazo hormonal en siete universidades estadounidenses.
Casi todos los meses aparecen nuevas investigaciones sobre los beneficios de la terapia de reemplazo hormonal, lo que hace que cada vez más médicos y pacientes se interesen por su uso.
El envejecimiento no es un proceso de pérdida funcional y declive inalterable. La disminución de los niveles de muchas de nuestras hormonas a lo largo de la vida se relaciona con este proceso de envejecimiento y su reposición de manera controlada y correctamente prescrita retrasa la pérdida funcional y el declive general asociado al envejecimiento.